Un Tesoro Incompleto.
Mapa: Nuevas Áreas Protegidas Propuestas · Departamento de Santa Cruz. Libro: Patrimonio Natural de Santa Cruz. Año: 2015. Autor: Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz. Willy Kenning Moreno.
Dijimos en el capítulo respectivo, al inicio de este libro, que todas las ecorregiones que ocurren en el territorio cruceño están representadas en su Sistema Departamental de Conservación del Patrimonio Natural, y que este puede ser reputado como muy completo y cabal. Como para no dejar de asombrarnos en este libro de sorpresas, sin embargo, debemos reconocer que aún existen ecosistemas que reclaman su presencia en el mismo y quedan aún algunas áreas que no se han materializado como unidades de conservación.
Como presintiendo que algo faltara, y como debe ser, el Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz encargó a la Fundación Amigos de la Naturaleza, entidad especializada en conservación de biodiversidad, la realización de un estudio científico que identifique vacíos y prioridades de conservación remanentes en el territorio departamental.
Dicho estudio, indica que de la misma forma como gran parte de los sitios prioritarios por su alta concentración de la biodiversidad se encuentra en espacios geográficos ya declarados como áreas protegidas y unidades de conservación -las joyas de la corona-, todavía existe la necesidad de ampliar y reorientar esfuerzos en algunas de ellas, a la vez que existe "la urgente necesidad de consolidar nuevos territorios como espacios de conservación de nuestra biodiversidad"(36), espacios que vendrían a ser las joyas olvidadas del rico tesoro cruceño.
Dados a la tarea de sugerir estos espacios y basándose en indicadores bioecológicos muy categóricos y claros, como los de riqueza potencial de especies; áreas de concentración potencial de especies de distribución restringida; heterogeneidad de hábitats; patrones de distribución de cobertura vegetal leñosa y biomasa aérea; lluvia y precipitación horizontal; importantes criterios que dan noción de la composición, estructura y funcionamiento de la biodiversidad, los especialistas propusieron un portafolio de cuatro vacíos prioritarios de conservación a saber:
* Chiquitania Central: ubicada en la Provincia Cerradense Occidental, esta importante prioridad de conservación tiene una superficie de 422.118 hectáreas.
* Chiquitania Cruceña: interesante por albergar características de la Provincia Cerradense Occidental en una ubicación lejana y desprendida del Cerrado y de la Chiquitania histórica y convencional, alcanza las 73.202 hectáreas.
* Chiquitania Transicional a la Amazonia: camino a los Llanos de Moxos, previamente, y a la Amazonia, después, esta prioridad de conservación tiene aproximadamente 115.797 hectáreas y su biogeografía corresponde también a la Provincia Cerradense Occidental.
* Meandros del Ichilo: superpuestos con la tantas veces invadida y maltratada Reserva Forestal de El Choré, colindan además con la Reserva Departamental de Vida Silvestre Cicatrices de Meandros Antiguos del Río Ichilo, y suma una extensión de 528.941 hectáreas. Se ubica en la Provincia Biogeográfica Beniana.
La indiscutible fundamentación científica que sustenta la creación de nuevas áreas protegidas en estos vacíos de conservación debe ser contrastada con la viabilidad social, operativa y de manejo de las mismas, en tiempos en que el ímpetu desarrollista suele estar asociado al inmediatismo que imponen movimientos con fines más parecidos a intereses inmobiliarios rurales que a una vocación productiva real.
Al margen de las posiciones viciadas, sin embargo, también se debe tomar en cuenta las fundamentaciones virtuosas y se debe llevar adelante un modelo de información y consulta social que dé lugar al saludable ejercicio de la democracia y a la vez atienda el sagrado deber de propiciar el desarrollo y conservar el patrimonio natural.
Las joyas de la corona no están completamente protegidas y algunas aún no han sido registradas en nuestras arcas. Son piedras preciosas que siguen intactas, sin embargo, prodigándose en destellos al fondo de las lagunas y los ríos, esperando pacientemente su adhesión a nuestro patrimonio natural formal y oficial. Son joyas que se dejan observar, se ruborizan y se ufanan, se exhiben y se esconden, se conservan prístinas y vírgenes esquivando heroicamente persistentes intentos de desfloración. Son joyas que esperan su oportunidad de ser lucidas como distinguidas piezas de nuestro rico arcón.
Fuente. Libro: Patrimonio Natural de Santa Cruz. Año: 2015. Autor: Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz. Willy Kenning Moreno.
