Naturaleza

Naturaleza

» Contenidos.
» Unidades de Conservación del Patrimonio Natural.


Lomas de Arena.


Mapa:
Nombre: Lomas de Arena. / Categoría: Parque Regional. / Acción: Creación, 1991. / Instrumento Legal: Decreto Supremo Nro. 22911. / Área: 13.327 hectáreas. / Jurisdicción: Provincias Andrés Ibáñez y Cordillera. Municipio de La Guardia, Santa Cruz de la Sierra y Cabezas.

Nombre: Lomas de Arena. / Categoría: Parque Departamental y Área Natural de Manejo Integrado. / Acción: Recategorización, 2013. / Instrumento Legal: Resolución Administrativa Nro. 011/2013. / Área: 14.076 hectáreas. / Jurisdicción: Provincias Andrés Ibáñez y Cordillera. Municipio de La Guardia, Santa Cruz de la Sierra y Cabezas.

Nombre: Lomas de Arena. / Categoría: Parque Natural y Unidad Natural de Manejo Integrado Departamental. / Acción: Creación UCPN, 2015. / Instrumento Legal: Ley Departamental Nro. 98. / Área: 14.076 hectáreas. / Jurisdicción: Provincias Andrés Ibáñez y Cordillera. Municipio de La Guardia, Santa Cruz de la Sierra y Cabezas.

Libro: Patrimonio Natural de Santa Cruz. Año: 2015. Autor: Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz. Willy Kenning Moreno.

Parque Natural y Unidad Natural de Manejo Integrado Departamental.

A poca distancia de Santa Cruz de la Sierra, apenas 12 kilómetros hacia el sureste, en un paraje otrora conocido como El Palmar, con el encargo de atajar arenales y consolidar dunas, como bajado de otro planeta, se encuentra el Parque Natural Lomas de Arena.

Se trata de una región en la que, durante cientos sino miles de años, los intensos vientos predominantes en Santa Cruz y la erosión causada por los mismos sobre sedimentos o rocas arenosas consolidadas han venido transportando y acumulando cargas de arena provenientes de zonas deforestadas, así como de las playas del río Piraí, todas al noroeste, formando inmensas dunas blancas carentes, casi, de vegetación.

El paisaje resultante lo constituyen las muy atractivas y blancas montañas de arena encorvadas en dirección sudeste, y las lagunillas de aguas claras, de pequeña extensión y poca profundidad que se han formado en las depresiones y rincones existentes entre ellas, algunas de las cuales constituyen un curioso atractivo que la gente de la ciudad suele visitar como balneario de fines de semana.

Se trata, pues, de un paisaje de dunas o lomas de arena que están rodeadas con vegetación baja, arbustiva, y bosques secundarios de considerable altura que hacen destacar aún más a las dunas y acentúan el contraste de paisaje desértico con paisaje boscoso.

El área total de este parque natural es de 14.076 hectáreas, de las cuales las dunas ocupan unas 3.000 hectáreas. Aproximadamente el 80% del territorio del parque son fragmentos de bosques y sabanas rodeados de pequeñas fincas agropecuarias con pastos implantados y cultivos comerciales y de subsistencia.

Como se ha indicado, el Parque Lomas de Arena no es solo arena. Sobre los suelos de la mayor parte del área crece un bosque húmedo en transición hacia el Chaco, y una curiosa mezcla de las formaciones y especies de las ecorregiones que le son vecinas -Chaco, Bosque Chiquitano, incluso el sudoeste de la Amazonia-, y sus ecotonos.

No obstante lo desértico de 20% del territorio, y de lo intervenido del resto del área, la biodiversidad existente en el parque es notable. La cobertura vegetal remanente se expresa mediante la presencia de especies arbóreas muy emblemáticas, con predominio de aquellas adaptadas a ambientes secos como el toborochi, el cuchi, el cupesí, el curupaú, numerosas especies de cactáceas y bromelias, tanto terrestres como epífitas, y las palmeras más comunes de la región, que son el totaí, el sumuqué y el motacú, haciendo un total preliminar inventariado y documentado de 208 especies de plantas vasculares en 163 géneros y 73 familias distintas.

La cobertura vegetal y las especies de flora existentes favorecen la presencia de una fauna destacable en la que se registran 286 especies de aves, un 21% de las existentes en el país, algunas de ellas bajo diferentes categorías de amenaza y protección. Un total de 244 de las especies de aves presentes son residentes, a la vez que 30 son migrantes australes y 12 son migrantes boreales. La familia más abundante es la de los tiránidos, pájaros de pequeños a medianos que incluyen a los que genéricamente se conoce como viuditas, monjitas, benteveos, atrapamoscas, fiofíos, tijeretas, tiranuelos y otros, hasta sumar 36 especies, es decir un 13% del total de la avifauna local. Destacan también varias especies de carpinteros, loros, parabas y pavas, así como es muy conspicua la presencia de especies acuáticas.

Las Lomas de Arena son, pues, un espléndido lugar para la observación de aves, objeto específico por el que recibe gran parte de su visitación, e inclusive cuentan con algunas instalaciones para ello, como observatorios cubiertos, senderos, caminos, lugares abiertos protegidos por vegetación a su alrededor, así como el apoyo de una entidad especializada que tiene sus oficinas en las proximidades del ingreso al área.

La presencia de mamíferos también es importante, y se han registrado 42 especies en 8 órdenes y 21 familias, de las cuales 16 se encuentran bajo alguna categoría de conservación. Es fácil observar al menos 4 especies de monos, así como zarigüeyas y carachupas, perezosos, armadillos, osos hormigueros, venados, chanchos silvestres, tejones, zorros y un total de 12 especies de murciélago, muchos de ellos contribuyentes a la dispersión de semillas.

En lo cultural, se han encontrado en el área restos arqueológicos, más concretamente restos de cerámica que por su tipo se presume que hubiesen sido parte de un cementerio chané, etnia de tradición alfarera que habitaba una amplia comarca en el centro-sur del oriente del país y que dejaron sus vestigios dispersos por toda la región.

El Parque Natural Lomas de Arena es una unidad de conservación distinta, un regalo a la ciudad, un ambiente apto para la observación de flora y fauna, para la recreación y para la educación ambiental. Es un área que se presta como laboratorio para la experimentación de lo que se puede hacer para que subsista y se conserve una unidad de conservación tan cercana a una urbe tan grande.

Con una gran superficie protegida a la orilla misma de la frontera urbana, donde la presión inmobiliaria es intensa, casi insostenible, Lomas de Arena es un ámbito de permanente trabajo de coordinación ya que la mayor parte del área es tierra privada, cuidada por sus propietarios que coadyuvan con la autoridad del parque su conservación y tratan de entrar en dinámicas de sostenibilidad, de producción ecológica y atracción al turismo.

Algunos de los propietarios de fundos rurales en su interior han desarrollado infraestructura hotelera y de recreación, a la vez que se ha delimitado claramente los caminos y se ha prohibido y controlado la práctica de uso de vehículos cuatro por cuatro para recorrer las dunas. La parte privada que no es duna desértica es dedicada por la mayoría de sus propietarios a actividades ganaderas -lechería principalmente-, así como al cultivo de caña de azúcar todavía remanente en la zona, y otros cultivos de menor escala. Estas actividades, lamentablemente, favorecen que continúe la deforestación a baja escala, por lo que se redobla la necesidad de atención y coordinación con todos los actores involucrados.

En este empeño la Gobernación coadyuva con los gobiernos municipales de La Guardia, Cabezas y el de Santa Cruz de la Sierra, así como con los propietarios de tierras y los vecinos, que se han comprometido a colaborar para su gestión.

En suma, en el Parque Natural Lomas de Arena se lucha para alcanzar los objetivos de su creación: "proteger la perpetuidad de los recursos naturales y escénicos que constituyen ecosistemas de valor excepcional, antes que la acción del hombre los modifique o altere y que al tratarse de una zona de gran belleza panorámica, cumplirá también, dentro de un plan de manejo funciones recreativas y será motivo de atracción turística"(30).

Es la joya más cercana y visible, la más frágil de todas, una de las más tradicionales y visitadas, la más expuesta también, la que exige mayor responsabilidad y demanda consecuentemente una mayor y mejor atención.


Fuente. Libro: Patrimonio Natural de Santa Cruz. Año: 2015. Autor: Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz. Willy Kenning Moreno.


Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Sarkidiornis melanotos. Autor: Daniel Alarcón, Carmen Mateu.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Callicebus donacophilus. Autor: Steffen Reichle.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Chlorostilbon lucidus. Autor: Steffen Reichle.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Icterus croconotus. Autor: Daniel Alarcón, Carmen Mateu.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Athene cunicularia. Autor: Willy Kenning.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Phyllomedusa hypocondrialis. Autor: Steffen Reichle.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Lomas de Arena y la ciudad de Santa Cruz de la Sierra al fondo. Autor: Willy Kenning.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Última luz vespertina sobre las arenas. Autor: Rubén Darío Azogue.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Huellas del avance de las dunas sobre el bosque. Autor: Rubén Darío Azogue.

Foto: Unidades de Conservación del Patrimonio Natural · Lomas de Arena · Borde sur del parque. Autor: Willy Kenning.

Ellos nos apoyan


Especial: Soy Jesucristo